Guía para el uso de Tipografía en la Web

La tipografía responde a las limitaciones del medio en el que vive; sabemos que la mayoría de fuentes modernas funcionan bien tanto en la pantalla como en el papel, sin embargo, estudiar y conocer aquellas que fueron diseñadas específicamente para la pantalla nos ayudará a conocer las cualidades que afectan la legibilidad en la web.

1. Anti-aliasing: es el suavizado de los bordes de gráficos a los procesos que permiten minimizar el aliasing cuando se desea representar una señal de alta resolución en un sustrato de más baja resolución. Una buena fuente para la web sobrevive a este proceso y se mantiene legible, esta condición es más importante para tipografía muy pequeña (menos de 12 px).

2. Altura de la X: hace referencia a la altura de las letras en minúscula (caja baja) sin tener en cuenta ni los ascendientes ni descendientes. En la web, es recomendable utilizar fuentes que tengan la altura de la X grande, ya que ayuda a mejorar la legibilidad, sobretodo en textos de tamaño pequeño.

3. Contraste: Una tipografía con menos contraste entre los finos y gruesos, funciona mucho mejor en la web.

4. Apertura: Fuentes con aperturas más grandes, ayudan a que en tamaños pequeños, el texto resulte más legible, pues es más fácil diferenciar las letras.

5. Espaciado: Para tipografías en la web, es recomendable que las fuentes tengan mayor espaciado entre las letras.

Algunas fuentes nuevas diseñadas para su uso en la pantalla son: Roboto (Google, 2011), Segoe (Steve Matteson, 2004), San Francisco (Apple, 2014).

En cuanto al uso de serifas en la web; la sabiduría común nos indica que la serifa funciona muy bien en medios impresos, pues las serifas guían el ojo en la línea siendo ideal para párrafos largos de texto. Sin embargo, la sabiduría común es un poco opuesta cuando se trata de pantallas, ya que las serifas pueden resultar confusas para la lectura en textos de tamaño pequeño. Por esta razón, las tipografías sin serifas son más comúnmente utilizadas en textos largos en la web.

El texto en negativo (por ejemplo, fondo negro, texto blanco) es más difícil de leer, es recomendable usarlo solo en cantidades pequeñas y no en largos párrafos de texto. En la vida real, muy pocas cosas son percibidas como negro puro, usualmente son tintes de gris. Usar un fondo gris oscuro, y no negro, hará que todo se vea más suave y menos brusco.